
El día 2 de julio, festividad de Santa Isabel, es un día señalado en Zumarraga. Con tal ocasión se celebra una romería en la ermita de la Antigua cuyo acto principal lo constituye la
ezpata-dantza de Zumarraga. Abriendo la comitiva el alcalde, ezpata-dantzaris, txistularis y corporativos ascienden a pie hasta el santuario de la Antigua. Los dantzaris forman dos filas entrelazando sus espadas largas, el capitán se coloca al frente y toma las puntas de las dos filas, y detrás del grupo se situan tres
azkendaris con dos espadas pequeñas cada uno.

Antes de la misa, y previamente a la entrada en la iglesia del grupo de
ezpata-dantzaris, el recinto rebosa de gente. El grupo de danzas avanza hasta el altar y arranca a bailar el capitán. A continuación, los
azkendaris comienzan a bailar de rodillas uno a uno y acaban su actuación con el juego de las espadas pequeñas. Los
ezpata-dantzaris salen entonces al exterior y dan una vuelta completa al perímetro de la ermita. Después de la misa bailan el
aurresku en el pórtico de la iglesia y a continuación bailan de nuevo la
ezpata-dantza, pero sin incluir esta vez ninguna parte en posición genuflexa.

A las 20:00 horas los
ezpata-dantzaris, txistularis y corporativos emprenden el camino de regreso. Llegados ante el ayuntamiento, los dantzaris forman un arco de honor a las autoridades y bailan la
ezpata-dantza por última vez.

Además del día de Santa Isabel, que se celebra el 15 de agosto, la
ezpata-dantza de Zumarraga se baila también durante la festividad de la Virgen María, aunque en esta ocasión el baile se realiza en la propia parroquia. También en ese día se baila el aurresku después de la
ezpata-dantza.