
Juan Ignacio Iztueta registró la melodía de la
jorrai-dantza en el libro de melodías que publicó en 1826. Sin embargo, según afirma José Ignacio Ansorena, la melodía que recogió Azkue en Motriko un siglo más tarde presenta ciertas semejanzas con la melodía recogida por Iztueta, conteniendo ambas algunas frases musicales que han acabado perdiéndose en la versión que ha llegado hasta nosotros preservada por la tradición.